Vas a reunirte con tus clientes en 30 minutos. Estás revisando el expediente, y todo está en orden; los documentos de planificación patrimonial están al día, tienes los últimos resultados de inversión para compartir, y estás preparado para hablar de la próxima temporada fiscal y hacer recomendaciones. Bastante típico.
Al revisar los materiales, ves los nombres de varias organizaciones benéficas que tus clientes han apoyado anualmente durante al menos una década. Se trata de una oportunidad para añadir aún más valor a tus clientes, ayudándoles a desbloquear el ahorro fiscal al tiempo que cumplen sus deseos caritativos.
He aquí una guía sencilla para ayudarte en una conversación con un cliente.
Cuando trabajes con tus clientes, te animamos a que prestes atención a las preguntas que indiquen un interés por la filantropía: “¿Cuánto debo donar a la beneficencia este año? Recuérdame, ¿qué es deducible y qué no?”. Llama la atención de tus clientes sobre su historial de donaciones benéficas. Puede que ni siquiera sepan cuánto dan o cuánto tiempo llevan apoyando a sus organizaciones benéficas favoritas.
Nuestro objetivo es ser un recurso para ti, de modo que no dudes en coger el teléfono y llamarnos cada vez que un cliente mencione algo sobre filantropía. La mayoría de las veces, podemos ayudarte a servir al cliente. Si no podemos, te indicaremos la dirección correcta.
Gracias por la oportunidad de trabajar contigo. Estamos dispuestos a servir.